Mi esposa falleció el mes pasado de cáncer, En cuatro meses pasó de estar perfecta a dejarme, Y me e
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Mi esposa falleció el mes pasado de cáncer, En cuatro meses pasó de estar perfecta a dejarme, Y me encuentro muerto en vida. Me encuentro solo en casa, sin familia, ni hijos ni amistades. No soporto la idea de no volverla a ver. No tengo ganas de salir y me paso los días encerrado en casa llorando. Necesito compañía cerca, hablar con alguien pero sobre todo que me devuelvan a mi esposa. No quiero vivir sin ella. Y los médicos solo me dan pastillas para calmarme (fluoxetina y lorazepam) pero no mejora mi tristeza, dolor y desesperación. Es norma? Almenos que pueda vivir en un mundo en donde no sea consciente de mi presente. Gracias
Estimado amigo, la perdida de la esposa es una situación que puede llegar a ser extremadamente estresante y traumática. Si la perturbacion emocional interfiere con que puedas desarrollar tu vida diaria podría manifestarse un trastorno de estres postraumático, si los sintomas son de ansiedad en aumento y estas perdiendo la capacidad de proyectar tu futuro busca ayuda con psicoterapia. La OMS recomienda para trastorno por estres postraumático, la terapia cognitivo-conductual centrada en el trauma (TCCCT), la terapia de reprocesamiento y desensibilización por movimientos oculares (EMDR) y la terapia centrada en la exposición prolongada (EP). Un abrazo fuerte
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Lamento profundamente la pérdida de tu esposa. Lo que compartes refleja un dolor inmenso, y es comprensible que te sientas así tras una experiencia tan abrupta y devastadora. No hay un “modo correcto” de atravesarlo: cada persona lo vive de manera única.
La tristeza, la desesperanza y el aislamiento son reacciones humanas ante una pérdida tan significativa. Al mismo tiempo, es importante que no tengas que cargar con este dolor en soledad. Contar con un espacio seguro donde hablar de lo que sientes, poner en palabras tu pena y tu necesidad de compañía, puede ayudarte a transitar poco a poco este proceso.
La tristeza, la desesperanza y el aislamiento son reacciones humanas ante una pérdida tan significativa. Al mismo tiempo, es importante que no tengas que cargar con este dolor en soledad. Contar con un espacio seguro donde hablar de lo que sientes, poner en palabras tu pena y tu necesidad de compañía, puede ayudarte a transitar poco a poco este proceso.
Gracias por abrir tu corazón y compartir lo que estás viviendo, la pérdida de tu esposa en tan poco tiempo es un golpe muy profundo, y es completamente natural que sientas dolor, vacío y desesperanza, lo que describes forma parte de un duelo intenso: llorar con frecuencia, no tener ganas de salir, sentir soledad y hasta desear que el mundo se detenga son reacciones humanas frente a una ausencia tan significativa. No estás “fallando” ni “enfermo” por sentir así; lo que estás atravesando es la herida de haber perdido a alguien muy importante en tu vida.
El tratamiento médico con fármacos puede ayudarte a estabilizar ciertos síntomas, pero es comprensible que no te quite el dolor emocional ni el anhelo de volver a ver a tu esposa, porque eso no lo resuelve una pastilla, Lo que puede ayudarte es un espacio seguro donde hablar, expresar tu tristeza y elaborar este duelo poco a poco. La psicoterapia en procesos de duelo es muy recomendable, porque te permite compartir lo que sientes, recordar a tu esposa con respeto y cariño, y encontrar formas de seguir adelante sin sentir que la olvidas.
Sé que ahora te parece imposible imaginar un futuro distinto, pero con acompañamiento y apoyo puedes empezar a construir un día a día en el que el recuerdo de tu esposa esté presente de una manera más serena y menos dolorosa, aunque hoy no lo creas, existen grupos de apoyo para personas en duelo, espacios comunitarios y redes donde no tendrías que enfrentar esto solo. Abrirte a la compañía de otros puede ser un paso importante para salir del encierro y aliviar la sensación de soledad.
Tu dolor habla del gran amor que tuviste y sigues teniendo. Ese amor no desaparece, se transforma. Y aunque el proceso es duro y lento, puedes ir encontrando maneras de honrar su memoria al mismo tiempo que reconstruyes tu vida.
Hoy el dolor te inunda, pero no significa que siempre será así, paso a paso, con ayuda y compañía, podrás darle un nuevo sentido a tu vida, sin dejar de llevar en tu corazón a tu esposa. Eres más fuerte de lo que imaginas y mereces volver a encontrar un poco de paz.
El tratamiento médico con fármacos puede ayudarte a estabilizar ciertos síntomas, pero es comprensible que no te quite el dolor emocional ni el anhelo de volver a ver a tu esposa, porque eso no lo resuelve una pastilla, Lo que puede ayudarte es un espacio seguro donde hablar, expresar tu tristeza y elaborar este duelo poco a poco. La psicoterapia en procesos de duelo es muy recomendable, porque te permite compartir lo que sientes, recordar a tu esposa con respeto y cariño, y encontrar formas de seguir adelante sin sentir que la olvidas.
Sé que ahora te parece imposible imaginar un futuro distinto, pero con acompañamiento y apoyo puedes empezar a construir un día a día en el que el recuerdo de tu esposa esté presente de una manera más serena y menos dolorosa, aunque hoy no lo creas, existen grupos de apoyo para personas en duelo, espacios comunitarios y redes donde no tendrías que enfrentar esto solo. Abrirte a la compañía de otros puede ser un paso importante para salir del encierro y aliviar la sensación de soledad.
Tu dolor habla del gran amor que tuviste y sigues teniendo. Ese amor no desaparece, se transforma. Y aunque el proceso es duro y lento, puedes ir encontrando maneras de honrar su memoria al mismo tiempo que reconstruyes tu vida.
Hoy el dolor te inunda, pero no significa que siempre será así, paso a paso, con ayuda y compañía, podrás darle un nuevo sentido a tu vida, sin dejar de llevar en tu corazón a tu esposa. Eres más fuerte de lo que imaginas y mereces volver a encontrar un poco de paz.
Tu dolor es completamente comprensible: estás atravesando un duelo profundo y reciente. La tristeza, la desesperanza y la sensación de no poder seguir son reacciones frecuentes, aunque muy duras. Lo que puede marcar la diferencia es no vivirlo en soledad: buscar un grupo de apoyo en duelo, un psicólogo especializado en pérdidas, o alguien con quien hablar. Los medicamentos ayudan con síntomas, pero no reemplazan el proceso de duelo. El dolor ahora es inmenso, pero con acompañamiento puede volverse más llevadero con el tiempo.
El dolor que sientes por la pérdida de tu esposa es algo muy personal e indescriptible. Es normal que te sientas así. Con el tiempo, este dolor se volverá más llevadero y podrás encontrar momentos de alegría nuevamente. Hoy te diría también que es importante que logres diferenciar el dolor, que, de alguna manera, siempre lo llevamos, "del sufrimiento", que puedes evitar. Por esa razón, desde mi punto de vista lo ideal es evitar el uso de medicamentos, en la medida de lo posible, dependiendo cada caso, ya que puede obstaculizar este proceso de sanación y toma de conciencia. Te sugiero, buscar redes de apoyo, reconectar con amigos, no quedarte solo y psicoterapia.
Estimado señor, lamento mucho su pérdida. Es muy comprensible lo que usted está viviendo actualmente, el duelo es un proceso largo y complejo donde vamos asumiendo la pérdida vivida. La medicación puede ayudar a estabilizarlo emocionalmente, pero el apoyo psicoterapéutico es vital en estos casos. La sugerencia es buscar a un profesional de la salud mental para solicitar apoyo.
Lamento profundamente tu pérdida y el dolor inmenso que estás sintiendo. Es completamente comprensible que te sientas "muerto en vida" y que la idea de no volver a ver a tu esposa sea insoportable. Lo que estás pasando es uno de los dolores más grandes que un ser humano puede experimentar.
Quiero asegurarte que lo que sientes es normal. El duelo por la muerte de un ser querido es un proceso natural y no hay una forma "correcta" de vivirlo. La desesperación, la tristeza profunda, la falta de ganas de salir, el llanto y la sensación de que la vida ha perdido su sentido son parte de un proceso de duelo. El hecho de que no tengas familia, hijos ni amistades cerca hace que este dolor sea aún más pesado, y es natural que anheles desesperadamente compañía y el regreso de tu esposa.
Las pastillas que te han recetado (fluoxetina y lorazepam) pueden ayudar a controlar algunos síntomas, pero no van a curar el dolor emocional de la pérdida. La fluoxetina es un antidepresivo y el lorazepam es para la ansiedad. Si bien pueden ofrecer un alivio temporal para que no te sientas tan desbordado, no están diseñadas para llenar el vacío que dejó tu esposa. El duelo es un proceso que necesita ser vivido, no suprimido.
Lo que puedes hacer ahora
Valida tus emociones: No te juzgues por sentir lo que sientes. No hay nada de malo en llorar, en estar triste o en no querer salir. Estás de luto y te estás adaptando a una nueva realidad sin tu ser más querido.
Busca ayuda que no sea solo farmacológica: Necesitas hablar y ser escuchado. Ya que no tienes familia o amigos cerca, considera buscar un grupo de apoyo para personas en duelo. Estos grupos son espacios seguros donde puedes compartir tu experiencia con otros que han pasado por algo similar y te entienden sin juzgarte. También, buscar a un psicólogo o terapeuta especializado en duelo te puede dar las herramientas para navegar por estas emociones tan intensas.
Da pequeños pasos: No te exijas volver a ser quien eras de inmediato. Empieza con algo pequeño, como salir a caminar 10 minutos al día, o sentarte en el porche para tomar aire fresco. La idea no es que se te quite el dolor, sino que te conectes de a poco con el mundo exterior.
Habla de ella: Encontrar un lugar para hablar de tu esposa, de los recuerdos que tienen juntos y de lo mucho que la extrañas puede ser muy sanador. No tienes que hacerlo solo; puedes escribirlo en un diario, hablarle a ella en voz alta o buscar un grupo de apoyo para compartir sus historias.
Recuerda, no estás solo en tu dolor. Hay personas que pueden ayudarte a atravesar este camino. Tu dolor es real y tu anhelo por ella es la prueba del amor que compartieron.
Quiero asegurarte que lo que sientes es normal. El duelo por la muerte de un ser querido es un proceso natural y no hay una forma "correcta" de vivirlo. La desesperación, la tristeza profunda, la falta de ganas de salir, el llanto y la sensación de que la vida ha perdido su sentido son parte de un proceso de duelo. El hecho de que no tengas familia, hijos ni amistades cerca hace que este dolor sea aún más pesado, y es natural que anheles desesperadamente compañía y el regreso de tu esposa.
Las pastillas que te han recetado (fluoxetina y lorazepam) pueden ayudar a controlar algunos síntomas, pero no van a curar el dolor emocional de la pérdida. La fluoxetina es un antidepresivo y el lorazepam es para la ansiedad. Si bien pueden ofrecer un alivio temporal para que no te sientas tan desbordado, no están diseñadas para llenar el vacío que dejó tu esposa. El duelo es un proceso que necesita ser vivido, no suprimido.
Lo que puedes hacer ahora
Valida tus emociones: No te juzgues por sentir lo que sientes. No hay nada de malo en llorar, en estar triste o en no querer salir. Estás de luto y te estás adaptando a una nueva realidad sin tu ser más querido.
Busca ayuda que no sea solo farmacológica: Necesitas hablar y ser escuchado. Ya que no tienes familia o amigos cerca, considera buscar un grupo de apoyo para personas en duelo. Estos grupos son espacios seguros donde puedes compartir tu experiencia con otros que han pasado por algo similar y te entienden sin juzgarte. También, buscar a un psicólogo o terapeuta especializado en duelo te puede dar las herramientas para navegar por estas emociones tan intensas.
Da pequeños pasos: No te exijas volver a ser quien eras de inmediato. Empieza con algo pequeño, como salir a caminar 10 minutos al día, o sentarte en el porche para tomar aire fresco. La idea no es que se te quite el dolor, sino que te conectes de a poco con el mundo exterior.
Habla de ella: Encontrar un lugar para hablar de tu esposa, de los recuerdos que tienen juntos y de lo mucho que la extrañas puede ser muy sanador. No tienes que hacerlo solo; puedes escribirlo en un diario, hablarle a ella en voz alta o buscar un grupo de apoyo para compartir sus historias.
Recuerda, no estás solo en tu dolor. Hay personas que pueden ayudarte a atravesar este camino. Tu dolor es real y tu anhelo por ella es la prueba del amor que compartieron.
Muchas gracias por su pregunta, lo entiendo perfectamente le ofrezco una terapia de duelo para que supere su sensible duelo
Te abrazo con mis palabras en un momento tan devastador. Lo que estás viviendo es un duelo muy reciente y muy intenso: hace apenas un mes perdiste a tu esposa y, además, fue una pérdida rápida y sorpresiva. Es normal que sientas esa mezcla de vacío, desesperación, incredulidad y ganas de que todo esto no fuera real. Tu dolor no es un signo de debilidad ni de enfermedad, es la consecuencia de haber amado profundamente.
Quiero devolverte algunas ideas importantes:
Tu reacción es comprensible
En este punto del duelo es habitual sentir que la vida perdió sentido, llorar constantemente, sentir falta de energía y pensamientos como “no quiero vivir sin ella”. No significa que estés condenado a sentirte así para siempre, sino que estás en la fase más aguda de una herida muy reciente.
El medicamento no quita el duelo
Las pastillas (fluoxetina, lorazepam) pueden ayudarte a dormir un poco mejor o a bajar la ansiedad, pero no “anestesian” el vacío ni sustituyen el proceso emocional de la pérdida. El dolor necesita ser expresado, escuchado y acompañado; no puede desaparecer solo con medicación.
Necesitas compañía, no aislamiento
El encierro es una reacción natural, pero a la larga intensifica la sensación de soledad y desesperanza. Buscar compañía —no necesariamente grandes grupos, quizás alguien con quien tomar un café, una llamada, un grupo de apoyo de duelo— puede ser un sostén importante. Hablar de tu esposa, de cómo era, de lo que compartieron, te permitirá poco a poco integrar su ausencia de una forma más llevadera.
Tu esposa sigue contigo de otra manera
Ahora mismo quieres que vuelva físicamente, y es lógico. Pero con el tiempo el duelo busca transformar esa relación en un vínculo interno: ella ya no está en el mundo material, pero sigue en tu historia, en lo que dejó en ti, en tu manera de vivir. Ese paso no ocurre de inmediato; se va construyendo poco a poco con apoyo.
El riesgo de las ideas de no querer vivir
Cuando dices que no quieres vivir sin ella, entiendo que es un grito de desesperación. Si en algún momento esos pensamientos se vuelven más concretos: ideas de hacerte daño o de cómo dejar de vivir— es fundamental que lo digas en voz alta a un terapeuta, o incluso acudas a urgencias. No cargues solo con esa oscuridad.
Mi recomendación sería:
Buscar un grupo de apoyo en duelo (hospitales, iglesias, talleres). Allí estarías con personas que también han perdido a sus parejas.
Mantener un acompañamiento psicológico especializado en duelo; no es lo mismo que una consulta rápida de medicina general.
Hacer pequeños gestos diarios: abrir la ventana, caminar 10 minutos, escribir una carta a tu esposa contando cómo te sientes.
Quiero devolverte algunas ideas importantes:
Tu reacción es comprensible
En este punto del duelo es habitual sentir que la vida perdió sentido, llorar constantemente, sentir falta de energía y pensamientos como “no quiero vivir sin ella”. No significa que estés condenado a sentirte así para siempre, sino que estás en la fase más aguda de una herida muy reciente.
El medicamento no quita el duelo
Las pastillas (fluoxetina, lorazepam) pueden ayudarte a dormir un poco mejor o a bajar la ansiedad, pero no “anestesian” el vacío ni sustituyen el proceso emocional de la pérdida. El dolor necesita ser expresado, escuchado y acompañado; no puede desaparecer solo con medicación.
Necesitas compañía, no aislamiento
El encierro es una reacción natural, pero a la larga intensifica la sensación de soledad y desesperanza. Buscar compañía —no necesariamente grandes grupos, quizás alguien con quien tomar un café, una llamada, un grupo de apoyo de duelo— puede ser un sostén importante. Hablar de tu esposa, de cómo era, de lo que compartieron, te permitirá poco a poco integrar su ausencia de una forma más llevadera.
Tu esposa sigue contigo de otra manera
Ahora mismo quieres que vuelva físicamente, y es lógico. Pero con el tiempo el duelo busca transformar esa relación en un vínculo interno: ella ya no está en el mundo material, pero sigue en tu historia, en lo que dejó en ti, en tu manera de vivir. Ese paso no ocurre de inmediato; se va construyendo poco a poco con apoyo.
El riesgo de las ideas de no querer vivir
Cuando dices que no quieres vivir sin ella, entiendo que es un grito de desesperación. Si en algún momento esos pensamientos se vuelven más concretos: ideas de hacerte daño o de cómo dejar de vivir— es fundamental que lo digas en voz alta a un terapeuta, o incluso acudas a urgencias. No cargues solo con esa oscuridad.
Mi recomendación sería:
Buscar un grupo de apoyo en duelo (hospitales, iglesias, talleres). Allí estarías con personas que también han perdido a sus parejas.
Mantener un acompañamiento psicológico especializado en duelo; no es lo mismo que una consulta rápida de medicina general.
Hacer pequeños gestos diarios: abrir la ventana, caminar 10 minutos, escribir una carta a tu esposa contando cómo te sientes.
Lamento mucho que estés en esta situación. La verdad, es esperable y comprensible lo que sientes. Ha pasado muy poco tiempo y la pérdida de la pareja sobre todo en una relación sana, es un cambio muy grande, en la vida en pareja estaba el proyecto de vida y eso dificulta encontrar sentido y encontrarse uno mismo, pero hay que recordar que la vida siempre ha sido nuestra propia experiencia, a veces muy acompañado, a veces menos, pero nosotros nos aislamos y sentimos solos, al desconectarnos del entorno, del apoyo, de los cercanos, de quienes nos conocen y nos ven aún cuando nos tapemos los ojos y nos aislemos, nuestra experiencia seguirá cuando podamos volver a conectarnos.
Entiendo tu dolor. Lo que sientes es una reacción normal de duelo: tristeza profunda, vacío, desesperanza y necesidad de tu esposa. Los medicamentos ayudan con la ansiedad, pero no quitan el dolor de la pérdida.
Lo más importante ahora es que no lo atravieses solo. Hablar con un psicólogo de duelo, unirte a un grupo de apoyo o tener algún contacto cercano puede darte alivio. Intenta cuidar pequeñas rutinas (comer, abrir la ventana, caminar unos minutos), aunque parezca difícil.
Si en algún momento sientes que no quieres seguir viviendo, busca ayuda inmediata: llama a un servicio de urgencias o una línea de crisis. Tu dolor es real, pero no tienes por qué llevarlo solo.
¿Quieres que te resuma en pasos simples qué podrías hacer día a día para sostenerte en este momento?
Lo más importante ahora es que no lo atravieses solo. Hablar con un psicólogo de duelo, unirte a un grupo de apoyo o tener algún contacto cercano puede darte alivio. Intenta cuidar pequeñas rutinas (comer, abrir la ventana, caminar unos minutos), aunque parezca difícil.
Si en algún momento sientes que no quieres seguir viviendo, busca ayuda inmediata: llama a un servicio de urgencias o una línea de crisis. Tu dolor es real, pero no tienes por qué llevarlo solo.
¿Quieres que te resuma en pasos simples qué podrías hacer día a día para sostenerte en este momento?
Buenas tardes. Antes que todo, señalarle que perder a una persona tan relevante en su vida de esa manera es un golpe así que su actual sentir es una reacción comprensible dentro del contexto de un duelo. La tristeza, soledad y desesperanza son parte de un duelo que necesita tiempo, cuidado y un acompañamiento cercano. Los fármacos pueden ayudar a calmar ciertos síntomas pero no pueden elaborar el dolor de la pérdida. Para eso, suele ser valioso contar con un espacio de apoyo donde pueda hablar, que de lugar a sus emociones y facilite el aprender a manejar la angustia diaria. Existen terapias enfocadas en el duelo siendo una de ellas la terapia cognitivo-conductual que acompaña este proceso de manera respetuosa y ayuda a encontrar estrategias para sobrellevar el día a día sin sentir que tiene que hacerlo solo. No hay un camino rápido ni sencillo pero sí hay acompañamiento posible. Saludos !!!
Lamento muchísimo tu pérdida. Lo que estás sintiendo es una reacción muy humana frente a un duelo tan doloroso: tristeza intensa, soledad y desesperanza. Perder a alguien tan importante de manera tan rápida y brusca puede dejarte con la sensación de que nada tiene sentido.
Es normal que los medicamentos ayuden a estabilizar un poco, pero no siempre resuelven el dolor emocional. Desde la terapia, se trabaja en acompañar este proceso de duelo, aprender a expresar y validar tus emociones, y poco a poco encontrar formas de reconectar con la vida sin que eso signifique olvidar a tu esposa.
El hecho de que quieras hablar con alguien ya muestra una necesidad sana de compañía y apoyo. Buscar un espacio terapéutico puede darte contención, estrategias para sobrellevar la soledad y un lugar seguro donde elaborar tu dolor.
Si en algún momento sientes que necesitas un espacio seguro para hablar de esto con calma y encontrar herramientas para sobrellevarlo, estaré disponible para acompañarte en ese proceso, saludos.
Es normal que los medicamentos ayuden a estabilizar un poco, pero no siempre resuelven el dolor emocional. Desde la terapia, se trabaja en acompañar este proceso de duelo, aprender a expresar y validar tus emociones, y poco a poco encontrar formas de reconectar con la vida sin que eso signifique olvidar a tu esposa.
El hecho de que quieras hablar con alguien ya muestra una necesidad sana de compañía y apoyo. Buscar un espacio terapéutico puede darte contención, estrategias para sobrellevar la soledad y un lugar seguro donde elaborar tu dolor.
Si en algún momento sientes que necesitas un espacio seguro para hablar de esto con calma y encontrar herramientas para sobrellevarlo, estaré disponible para acompañarte en ese proceso, saludos.
Sr. paciente, lamento mucho su pérdida. por lo que escribe era muy importante en su vida y entiendo el dolor que hay su ausencia le provica. El estar solo de un momento para otro ha sido un evento duro y doloroso y el poco tiempo de su pérdida trae consigo el sentimiento de no poder soportar el dpia a día. quiero decirle que lo que siente es normal y poco a poco la vida traerá alivio para ud. Serpia importante que se rodee de sus cercano, como familia y amigos, los que sin duda siguen en su vidas, sin embargo lo invito a ver a esa persona que lo llama seguido o lo va a ver para saber como se encuenyra. no se cierre tanto, y agradezco que haya dejado este mensaje, no es necesario que pase por este proceso solo. Le comento que como psicóloga tambipen trabajo con las energías personales, para elevar campo vibracional de manera de comenzar a ver todo desde otro sentir, de otro prisma vital. Se ue mirarnos desde solo el concepto de salud no es suficiente, también abordo la emocionalidad, los pensamientos, su presente y su historia y juntos podemos co crear un nuevo presente, un nueva mirada, un uto conocimiento, develando los miedos con valentía y enteresa. Ud puede, todo lo puede. Si desea contactarme sería un honor acompañarlo, ya sea presencial u online. Un abrazo fraterno.
Lamento profundamente tu pérdida. Lo que sientes no solo es normal, sino también una respuesta humana al dolor tan intenso de perder a alguien que amas profundamente. No es algo que se resuelva con rapidez y mucho menos únicamente con medicación. Te sugiero buscar apoyo profesional, con especialidad en duelo. Un abrazo
Sin duda es una pérdida muy dolorosa, lo lamento. Que sea tan repentino sin lo hace más difícil. Lo que estás sintiendo es una reacción muy humana en un duelo tan fuerte.
Los medicamentos pueden aliviar algo, pero no reemplazan el acompañamiento emocional. Sería importante que no lo vivas solo, un psicólogo especializado en duelo o un grupo de apoyo pueden darte un espacio para hablar y sentirte acompañado.
El dolor no desaparece de un día para otro, pero con apoyo se puede ir encontrando alivio poco a poco. Y si en algún momento las ganas de no vivir se hacen muy intensas, busca ayuda de inmediato en urgencias o con atenciones telefónicas para crisis. Se puede salir de esto
Los medicamentos pueden aliviar algo, pero no reemplazan el acompañamiento emocional. Sería importante que no lo vivas solo, un psicólogo especializado en duelo o un grupo de apoyo pueden darte un espacio para hablar y sentirte acompañado.
El dolor no desaparece de un día para otro, pero con apoyo se puede ir encontrando alivio poco a poco. Y si en algún momento las ganas de no vivir se hacen muy intensas, busca ayuda de inmediato en urgencias o con atenciones telefónicas para crisis. Se puede salir de esto
Lamento mucho su perdida, sin duda que es muy doloroso y tomara un tiempo el aprender a vivir con esa pena. Continue con la medicación que le han dado, y apóyese con un psicólogo que lo podrá escuchar y apoyar en este duelo.
Lo que estás viviendo es una experiencia de dolor extremo, y es normal que tu mente y tu cuerpo estén atrapados en esta desesperanza. Como dice Giorgio Nardone en La mente herida, no se trata de borrar la ausencia ni de anestesiar el dolor con medicamentos, sino de aprender a transformar esta herida en algo que te permita seguir viviendo sin sentirte destruido.
Desde la Terapia Breve Estratégica trabajamos con estrategias específicas que ayudan a interrumpir el círculo de desesperación y aislamiento, para que poco a poco logres relacionarte de otro modo con el recuerdo de tu esposa, sin perderla en tu corazón, pero recuperando tu fuerza vital para seguir adelante. No es resignarse ni olvidar, es encontrar la manera de vivir sin que el dolor te paralice.
Desde la Terapia Breve Estratégica trabajamos con estrategias específicas que ayudan a interrumpir el círculo de desesperación y aislamiento, para que poco a poco logres relacionarte de otro modo con el recuerdo de tu esposa, sin perderla en tu corazón, pero recuperando tu fuerza vital para seguir adelante. No es resignarse ni olvidar, es encontrar la manera de vivir sin que el dolor te paralice.
Hola, muchas personas han pasado por lo que estas pasando, es un duelo pero que no está siendo bien procesado, por esto necesitas ayuda profesional. Tienes que realizar un proceso psicoterapéutico, para poder sanar y superar esta pérdida, tienes que agendar una hora de psicoterapia lo antes posible para que te puedas sentir mejor, mucho éxito.
Estimado lamento mucho tu pérdida. Lo que describes refleja un dolor muy profundo y natural ante una experiencia tan reciente y significativa como la muerte de tu esposa. El duelo, especialmente en etapas iniciales, puede sentirse como un vacío absoluto, con pensamientos de desesperanza y una tristeza que parece no tener fin.
Es importante que sepas que tu reacción no es anormal: estás atravesando un proceso de duelo, y el cuerpo y la mente buscan formas de adaptarse a una ausencia tan dolorosa. Sin embargo, cuando el sufrimiento es tan intenso y se acompaña de ideas de no querer vivir, es fundamental que no lo transites en soledad.
Te animaría a que busques un acompañamiento terapéutico especializado en duelo, que te permita expresar tu dolor y poco a poco ir encontrando un sentido para continuar. También puede ser de gran ayuda recurrir a grupos de apoyo para personas que han pasado por pérdidas similares.
Los fármacos pueden ayudar a contener la ansiedad y el insomnio, pero no reemplazan el proceso emocional necesario. Por eso, la psicoterapia se vuelve esencial en este momento.
Quiero transmitirte que aunque hoy sientas que no hay salida, con acompañamiento adecuado es posible transitar este dolor y volver a encontrar motivos para vivir, honrando el vínculo con tu esposa de una manera distinta. No estás solo en esto, pedir ayuda es un paso muy valioso.
Es importante que sepas que tu reacción no es anormal: estás atravesando un proceso de duelo, y el cuerpo y la mente buscan formas de adaptarse a una ausencia tan dolorosa. Sin embargo, cuando el sufrimiento es tan intenso y se acompaña de ideas de no querer vivir, es fundamental que no lo transites en soledad.
Te animaría a que busques un acompañamiento terapéutico especializado en duelo, que te permita expresar tu dolor y poco a poco ir encontrando un sentido para continuar. También puede ser de gran ayuda recurrir a grupos de apoyo para personas que han pasado por pérdidas similares.
Los fármacos pueden ayudar a contener la ansiedad y el insomnio, pero no reemplazan el proceso emocional necesario. Por eso, la psicoterapia se vuelve esencial en este momento.
Quiero transmitirte que aunque hoy sientas que no hay salida, con acompañamiento adecuado es posible transitar este dolor y volver a encontrar motivos para vivir, honrando el vínculo con tu esposa de una manera distinta. No estás solo en esto, pedir ayuda es un paso muy valioso.
Estimado,
La pérdida del cónyuge es uno de los eventos más dolorosos que una persona puede vivir a lo largo de la vida, más aún cuando se trata de una enfermedad inesperada. Es un principio del duelo, es normal y necesario vivir el dolor de la pérdida, sin embargo, es importante estar atento a la evolución de esa tristeza para cuidar que ese duelo se elabore de manera adecuada y no se complique. Cabe destacar que cualquier duelo implica un evento traumático en la vida de un ser humano, y la evidencia científica ha demostrado que el método más efectivo para este tipo de situaciones es el abordaje mediante técnicas de integración cerebral. Los síntomas disminuyen de manera rápida y significativa al reprocesar el evento truamático.
Los fármacos ayudarán a mitigar los síntomas pero no hacen el trabajo del duelo. Te sugiero ser acompañado por un profesional de la salud mental psicólogo, para monitorear y favorecer que esta experiencia dolorosa pueda ser elaborada adecuadamente. Y si quieres una intervención rápida y efectiva, te sugiero reprocesar con técnicas de integración cerebral, con algún psicólogo certificado.
Un abrazo!
La pérdida del cónyuge es uno de los eventos más dolorosos que una persona puede vivir a lo largo de la vida, más aún cuando se trata de una enfermedad inesperada. Es un principio del duelo, es normal y necesario vivir el dolor de la pérdida, sin embargo, es importante estar atento a la evolución de esa tristeza para cuidar que ese duelo se elabore de manera adecuada y no se complique. Cabe destacar que cualquier duelo implica un evento traumático en la vida de un ser humano, y la evidencia científica ha demostrado que el método más efectivo para este tipo de situaciones es el abordaje mediante técnicas de integración cerebral. Los síntomas disminuyen de manera rápida y significativa al reprocesar el evento truamático.
Los fármacos ayudarán a mitigar los síntomas pero no hacen el trabajo del duelo. Te sugiero ser acompañado por un profesional de la salud mental psicólogo, para monitorear y favorecer que esta experiencia dolorosa pueda ser elaborada adecuadamente. Y si quieres una intervención rápida y efectiva, te sugiero reprocesar con técnicas de integración cerebral, con algún psicólogo certificado.
Un abrazo!
Estimado doliente: sí, lo que sientes es esperable. Es natural que te sientas de esa forma, ya que estás en duelo. Es altamente importante que busques apoyo en algún psicólogo que pueda acompañarte en lo que estás viviendo. El duelo es un proceso de 5 etapas y cada una de ellas tiene sus propios bemoles. Es tan importante que comprendas estas fases, ya que cuando comprendemos lo que nos ocurre es mucho más factible llevar el dolor.
Somos seres humanos y como tal, estamos hechos para vivir en pareja y comunidad. Tu soledad no tienes por qué vivirla solo. Sé que puedes salir adelante. Por favor, busca ayuda. Un abrazo
Somos seres humanos y como tal, estamos hechos para vivir en pareja y comunidad. Tu soledad no tienes por qué vivirla solo. Sé que puedes salir adelante. Por favor, busca ayuda. Un abrazo
Estás en DUELO por la pérdida de una persona crucial en tu vida, por lo pronto, más que terapia, necesitas acompañamiento.
Si tu realidad te lo permite, buscar hacer algo que te de placer sirve, lo que sea, "darte esos permisos que con ella no podías", suena banal y simploide, pero sirve.
Y mantenerte acompañado de seres queridos sirve, sino, en serio, una mascota también ayuda.
En términos clínicos, si te apoyas por un profesional, llorarás varias sesiones y después andarás más liviano, pero el duelo puede extenderse por unos 2 años fácil.
No sé qué edad tienes, tampoco sé si recomendarte hacer deporte sirve de algo, sé que recomendar que no recurras a la botella es clave, pero más allá de eso, el tiempo lo sana todo.
Mi más sentido pésame y espero que te apoyes en alguien, sea cura, psicólogo, familia, entrenador de gym, gato o perro, pero solo no.
Si tu realidad te lo permite, buscar hacer algo que te de placer sirve, lo que sea, "darte esos permisos que con ella no podías", suena banal y simploide, pero sirve.
Y mantenerte acompañado de seres queridos sirve, sino, en serio, una mascota también ayuda.
En términos clínicos, si te apoyas por un profesional, llorarás varias sesiones y después andarás más liviano, pero el duelo puede extenderse por unos 2 años fácil.
No sé qué edad tienes, tampoco sé si recomendarte hacer deporte sirve de algo, sé que recomendar que no recurras a la botella es clave, pero más allá de eso, el tiempo lo sana todo.
Mi más sentido pésame y espero que te apoyes en alguien, sea cura, psicólogo, familia, entrenador de gym, gato o perro, pero solo no.
Buenas noches,
Lamento mucho la partida de tu esposa, es totalmente normal sentirse mal y llorar después de la pérdida de tu esposa. El duelo es una reacción natural frente a una pérdida tan significativa. Llorar, sentir tristeza, vacío o incluso desorientación son formas en que tu mente y tu cuerpo procesan lo que ha pasado. No significa debilidad, sino que estás atravesando un proceso humano y saludable, pero doloroso. Cada persona vive el duelo a su manera y en su propio tiempo. Lo importante es que no te juzgues por lo que sientes y que te permitas expresar esas emociones. Si en algún momento sientes que el dolor es demasiado intenso o que no puedes sobrellevarlo solo, buscar apoyo en familiares, amigos o en un espacio terapéutico puede ayudarte mucho.
Un abzo
Lamento mucho la partida de tu esposa, es totalmente normal sentirse mal y llorar después de la pérdida de tu esposa. El duelo es una reacción natural frente a una pérdida tan significativa. Llorar, sentir tristeza, vacío o incluso desorientación son formas en que tu mente y tu cuerpo procesan lo que ha pasado. No significa debilidad, sino que estás atravesando un proceso humano y saludable, pero doloroso. Cada persona vive el duelo a su manera y en su propio tiempo. Lo importante es que no te juzgues por lo que sientes y que te permitas expresar esas emociones. Si en algún momento sientes que el dolor es demasiado intenso o que no puedes sobrellevarlo solo, buscar apoyo en familiares, amigos o en un espacio terapéutico puede ayudarte mucho.
Un abzo
Estimado, un duelo es una elaboración psicológica que puede tomar meses e inclusive años. El sentir una tristeza profunda e incertidumbre es totalmente esperable, así como los cuestionamientos del cómo y por qué sucedieron las cosas. Tampoco es necesario el concepto de "dejar ir" u "olvidar" a la persona fallecida. Probablemente eso no suceda. Pero también recuerde que usted sigue vivo y merece lograr disfrutar nuevamente de aquello, aunque pueda tomarle tiempo todavía. Anímese a tomar terapia psicológica y conversar acerca de lo que está pasando.
Hola!! gracias por contar todo lo que te está pasando. Primero lamento profundamente tu pérdida no quiero imaginar el dolor que debes estar sintiendo. Respondiendo a tu pregunta es completamente normal lo que te está pasando, mencionas que falleció el mes pasado es MUY reciente, alguien no puede pasar pagina al mes, nisiquiera a los 3, o 5 meses, normalmente las personas que viven duelos pueden tardarse 1 a 2 años poder acostumbrarse y hacerse la idea de que esa persona no esta fisicamente más. No hay un tiempo "correcto" de cuando deberías sentirte mejor, pero el duelo es un proceso que toma su tiempo, tendrás que aprender a vivir con ese dolor, ninguna terapia podrá borrar eso que te falta, el dolor pero con el tiempo la idea es que el dolor vaya disminuyendo y aprender a vivir con él. Por otro lado, los remedios no hacen magia, esos remedios te pueden ayudar a mantenerte "estable" dentro de lo que cabe pero no pueden hacer magia si hoy vives un dolor que es muy real y eso no lo quita un medicamento. Debes tener paciencia, se que es muy dificil lo que vives, pero debes vivirlo a tu tiempo y sin apurarte. Lamento nuevamente tu perdida, te animo a que busques terapia con un psicólogo experto en duelo si o si debes tener un acompañamiento en estos momentos tan dificiles.
Lamento profundamente tu pérdida, recibe mi más sentido pésame. Perder a tu esposa en tan poco tiempo es una herida que desgarra, y lo que sientes hoy, el vacío, la desesperanza, las lágrimas que no paran, es la forma en que tu corazón intenta comprender una ausencia que parece imposible de aceptar. No estás “mal” por sentirte así; lo que vives es la expresión más humana del amor cuando se rompe un vínculo tan profundo.
Es comprensible que te sientas “muerto en vida” y que los medicamentos no logren calmar el dolor, porque lo que duele no es un síntoma, sino la falta real de quien amabas. La tristeza, el encierro, las ganas de que ella regrese son parte del duelo, aunque se sienta insoportable. En medio de tanta oscuridad, puede ayudarte recordar que este dolor es también la medida del amor que compartieron, y que cada lágrima honra el lugar que ella sigue ocupando en tu vida.
No hay un camino correcto ni un tiempo establecido para atravesar esta experiencia. Lo que sí es importante es que te permitas sentir, llorar, enojarte, y poco a poco también abrir pequeños espacios para no cargar en soledad con esta ausencia. A veces se trata de pasos muy pequeños: dejar entrar a alguien a escucharte, recibir compañía aunque no haya palabras suficientes, permitir que el dolor conviva con la vida que sigue.
Tu duelo es válido, tu amor es inmenso, y aunque hoy todo parezca insoportable, lo que estás viviendo no significa que no haya futuro, sino que ahora estás en el tramo más crudo de este camino. Ojalá puedas rodearte de gestos de compañía que te sostengan mientras transitas este dolor tan grande.
Es comprensible que te sientas “muerto en vida” y que los medicamentos no logren calmar el dolor, porque lo que duele no es un síntoma, sino la falta real de quien amabas. La tristeza, el encierro, las ganas de que ella regrese son parte del duelo, aunque se sienta insoportable. En medio de tanta oscuridad, puede ayudarte recordar que este dolor es también la medida del amor que compartieron, y que cada lágrima honra el lugar que ella sigue ocupando en tu vida.
No hay un camino correcto ni un tiempo establecido para atravesar esta experiencia. Lo que sí es importante es que te permitas sentir, llorar, enojarte, y poco a poco también abrir pequeños espacios para no cargar en soledad con esta ausencia. A veces se trata de pasos muy pequeños: dejar entrar a alguien a escucharte, recibir compañía aunque no haya palabras suficientes, permitir que el dolor conviva con la vida que sigue.
Tu duelo es válido, tu amor es inmenso, y aunque hoy todo parezca insoportable, lo que estás viviendo no significa que no haya futuro, sino que ahora estás en el tramo más crudo de este camino. Ojalá puedas rodearte de gestos de compañía que te sostengan mientras transitas este dolor tan grande.
Recibe la ayuda de un psicólogo.
Necesitas que te entiendan y que te contengan, necesitas que sean empáticos contigo, que se pongan en tu lugar, que te escuchen. Además, como decías, necesitas compañía.
Yo estoy aquí para ayudarte, soy psicólogo y hago atención en línea
Necesitas que te entiendan y que te contengan, necesitas que sean empáticos contigo, que se pongan en tu lugar, que te escuchen. Además, como decías, necesitas compañía.
Yo estoy aquí para ayudarte, soy psicólogo y hago atención en línea
Hola. Te cuento que soy psicóloga, podría acompañarte en el duelo que estás viviendo. Creo que es importante que recibas apoyo psicológico. Contáctame si lo deseas.
Mira, si tu esposa murió el mes pasado y más encima si todo se produjo tan rápido, sí es normal que estés pasando por un proceso de duelo. Lo que sí te sugeriría es que si no tienes con quien hablar al respecto puedas generar redes de apoyo, por ejemplo, acercándote a alguna iglesia si tienes alguna creencia o acercándote a grupos que realicen actividades de tu gusto. Ahora, si no ves posible hacer estas cosas, puedes comenzar una terapia. Ahí, el acompañamiento podrá ser mejor que esta respuesta, porque se podrá ahondar en detalles que en tu pregunta no mencionas. Espero que te sirva mi respuesta; te envío un abrazo.
Lamento su pérdida. Le sugiero buscar apoyo psicológico para poder trabajar el duelo en curso. Tristemente no le pueden devolver a su esposa, pero pueden darle una ayuda importante para acompañarlo en este doloroso momento
Lamento mucho tu pérdida y entiendo el dolor por el que estás pasando. En este momento, es normal que te sientas de esa forma, ya que la pérdida de un ser querido, de manera tan abrupta, ha generando en ti un duelo muy profundo y una pena muy grande en tu corazón.
En estos momentos, es recomendable que recibas un acompañamiento especializado, para que puedas procesar el duelo que estás viviendo y popo a poco ir retomando tu vida.
Para esto te recomiendo que complementes el tratamiento psiquiátrico con psicoterapia, para que tengas un espacio seguro en el que puedas expresar tus emociones y procesar esta pérdida de manera saludable.
En estos momentos, es recomendable que recibas un acompañamiento especializado, para que puedas procesar el duelo que estás viviendo y popo a poco ir retomando tu vida.
Para esto te recomiendo que complementes el tratamiento psiquiátrico con psicoterapia, para que tengas un espacio seguro en el que puedas expresar tus emociones y procesar esta pérdida de manera saludable.
Siento profundamente tu pérdida. Lo que describes —la tristeza intensa, el dolor insoportable, la sensación de vacío y de no poder seguir adelante— es una reacción humana muy comprensible ante la muerte de una persona tan importante en tu vida. Perder a un ser querido, y más aún de forma tan rápida, es una experiencia devastadora que conmociona todo: el cuerpo, las emociones, los pensamientos y la vida cotidiana. No estás “mal” por sentir lo que sientes; estás atravesando un duelo profundo.
Desde el psicoanálisis relacional, entendemos que el duelo no es un proceso lineal ni rápido. No se trata de “olvidar” ni de “superar” a quien falleció, sino de ir encontrando —a tu propio ritmo— una manera distinta de seguir viviendo, integrando ese vínculo tan significativo en tu presente, aunque de otra forma. Este proceso puede sentirse abrumador y solitario, y por eso es tan importante no vivirlo en aislamiento.
En terapia, te ofrezco un espacio seguro y sin juicios donde puedas hablar de tu esposa, de tu dolor y de todo lo que estás sintiendo, sin presión ni expectativas. Un espacio donde no tengas que “estar bien” ni disimular, sino simplemente ser acompañado en tu experiencia, incluso en los momentos en que parece insoportable. A veces, poder compartir el dolor con alguien que escuche y sostenga puede ser un primer alivio y una forma de empezar a respirar de nuevo.
Los fármacos pueden calmar algo del malestar físico y emocional, pero no reemplazan el acompañamiento humano ni el proceso de duelo. La terapia relacional no te devolverá a tu esposa —y eso es algo que nadie puede prometer—, pero sí puede ayudarte a no atravesar este dolor solo, a encontrar compañía, sostén y poco a poco nuevas formas de estar en el mundo sin perder lo que ella significó para ti.
No hay nada “anormal” en lo que sientes. Estás en una etapa muy temprana del duelo. Buscar ayuda y compañía es un acto de cuidado hacia ti mismo en medio de tanto sufrimiento. Si lo deseas, este puede ser un espacio donde juntos vayamos transitando este proceso, respetando tu ritmo y tu dolor, para que algún día puedas sentir que no estás completamente solo.
Desde el psicoanálisis relacional, entendemos que el duelo no es un proceso lineal ni rápido. No se trata de “olvidar” ni de “superar” a quien falleció, sino de ir encontrando —a tu propio ritmo— una manera distinta de seguir viviendo, integrando ese vínculo tan significativo en tu presente, aunque de otra forma. Este proceso puede sentirse abrumador y solitario, y por eso es tan importante no vivirlo en aislamiento.
En terapia, te ofrezco un espacio seguro y sin juicios donde puedas hablar de tu esposa, de tu dolor y de todo lo que estás sintiendo, sin presión ni expectativas. Un espacio donde no tengas que “estar bien” ni disimular, sino simplemente ser acompañado en tu experiencia, incluso en los momentos en que parece insoportable. A veces, poder compartir el dolor con alguien que escuche y sostenga puede ser un primer alivio y una forma de empezar a respirar de nuevo.
Los fármacos pueden calmar algo del malestar físico y emocional, pero no reemplazan el acompañamiento humano ni el proceso de duelo. La terapia relacional no te devolverá a tu esposa —y eso es algo que nadie puede prometer—, pero sí puede ayudarte a no atravesar este dolor solo, a encontrar compañía, sostén y poco a poco nuevas formas de estar en el mundo sin perder lo que ella significó para ti.
No hay nada “anormal” en lo que sientes. Estás en una etapa muy temprana del duelo. Buscar ayuda y compañía es un acto de cuidado hacia ti mismo en medio de tanto sufrimiento. Si lo deseas, este puede ser un espacio donde juntos vayamos transitando este proceso, respetando tu ritmo y tu dolor, para que algún día puedas sentir que no estás completamente solo.
Expertos
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