Lidia Valenzuela Guzmán

"Mi hija aún no dice la erre", "He notado que a las personas les cuesta entender lo que quiere decir mi hijo. ¿Es necesario llevarlo al Fonoaudiólogo?".
"Este niño no se controla, ¡es rabioso e impulsivo!", "Todos los días, a mitad de noche despierta con pesadillas", "No sé cómo expresar lo que me pasa", "Siento tanto cansancio en mi cuerpo y mente", "¿Me ayudará un Terapeuta Floral"
¡Bienvenidos, todos!
Puede que estas u otras expresiones sean tu caso. ¿Son comunes?, claro que sí. Son habituales los contextos desde el comunicarse resulta ser un obstáculo. Por ello es que, padres y profesores se preocupan día a día por el desarrollo del lenguaje y de las emociones en niños, adolescentes y adultos; pues su importancia influye directamente sobre la formación de todos los ámbitos de la vida. ¿Esto es parte de tu consulta?
Soy Lidia Valenzuela, profesionalmente me desempeño como Fonoaudióloga y Terapeuta Floral en el ámbito clínico y educativo. La vocación y motivación que mueven mi camino como terapeuta, convergen en el punto donde es posible aportar con mejoras a la calidad de vida de cada paciente que busca ayuda en sus problemas comunicativos y emocionales.
Mi labor como Fonoaudióloga consiste en detectar, prevenir, evaluar, diagnosticar y tratar trastornos específicos del lenguaje y otras dificultades que afectan al desarrollo del lenguaje y habla en niños, adolescentes y adultos. Bajo este prisma, la terapia fonoaudiológica se orienta objetivamente de acuerdo a las necesidades comunicativas que presenta el paciente, desarrollando cada sesión individualmente. Asimismo, llevar a cabo un trabajo colaborativo durante el proceso terapéutico junto a padres, familia y profesionales que se relacionen al paciente se hace imprescindible, ya que las orientaciones que se logran retroalimentar convergen en el futuro exitoso del paciente.

Como Terapeuta Floral, mi rol se fundamenta en escuchar y comprender la historia y conflicto que causa enfermedad en cada paciente, con el fin de otorgar la armonía necesaria a su cuerpo y alma por medio de la terapia floral. El cuerpo actúa como una esponja frente a las cuestiones del día a día. Sin embargo, existen circunstancias en donde su expresión se visualiza en diversas enfermedades y síntomas que aquejan al paciente. Y es desde este punto, donde la terapia prioriza la resolución de la causa y no solo la de los síntomas. Ese es el camino al que invita la Terapia Floral: ser el protagonista de tu propia sanación de cuerpo-mente-alma; proceso que es acompañado por determinadas esencias florales que inspiran al desarrollo personal. 
De igual forma, mi experiencia como terapeuta me ha llevado a lograr el enlace entre la Fonoaudiología y la Terapia Floral, de manera que las dificultades comunicativas o linguísticas que sobrellevan ciertos pacientes puedan ser sostenidas y acompañadas cariñosamente desde la energía floral.